jueves, 29 de septiembre de 2016

Un árbol lleno de frutos





Nuestras acciones hablan por nosotros, muestran la riqueza o pobreza de nuestro corazón.

"Al árbol de la fe se lo conoce por sus frutos..."

Lee la carta del Apóstol Santiago 2, 14-18

en el siguiente link encontrarás una Biblia on-line:
http://www.vatican.va/archive/ESL0506/_INDEX.HTM


Muchos Santos y Santas dieron testimonio de su fe a través de obras y acciones concretas. Ayudando a quienes más lo necesitaban, entregando su vida al servicio de los demás.

Buscá en internet e informate sobre la vida de tres Santos que vos elijas... fijate donde vivieron, como vivían su fe y especialmente que cosas hicieron. Luego y de manera resumida subí como un comentario de esta entrada un breve resumen de los aspectos más destacados de esos santos.

viernes, 2 de septiembre de 2016

Una Historia de Salvación



Como ya conversamos en clase, toda la historia de la humanidad es la Historia de Salvación en la cual Dios mismo se hace presente para darse a conocer.
Así, Dios se revela (se da a conocer) en los acontecimientos y la vida de las personas desde hace miles de años, incluso en la nuestra! En ella, Dios nos habla a todos como amigo y nos propone la felicidad que viene de su amor.

A diferencia de lo que creían muchas culturas antiguamente, Dios no está en un lugar alejado de la tierra y de las cosas de los hombres, por el contrario, este Dios se hace Hombre y vive para quedarse todo el tiempo con nosotros. En Jesucristo tenemos la imagen más clara y definitiva de este Dios presente en nuestra vida y nuestra historia.

Esta imagen de Dios era muy difícil de comprender en la antigüedad, sin embargo, el pueblo Hebreo fue el primero en descubrir a este Dios único, capaz de intervenir en favor de todos los que buscan el bien.

El único objetivo de Dios es que seamos felices, por eso se acerca a nosotros en hechos concretos de la historia, para que a través de ellos podamos conocerlo y conocer los caminos que nos llevan a esa felicidad verdadera.

En la historia de la humanidad y especialmente del pueblo Hebreo, hubo muchos momentos en los cuales Dios se hizo presente; en algunos liberando, en otros sanando, en otros perdonando. De muchas maneras Dios nos muestra su amor infinito y sus deseos de que seamos felices.
Muchas de estas historias las encontramos en La Biblia, en lo que conocemos como el Antiguo Testamento y que en gran parte es para los judíos la Torá (su libro sagrado), están todas las historias y testimonios hasta antes de Jesús. En lo que conocemos como Nuevo Testamento, están los hechos de Jesús, sus discípulos y aquellos que comenzaron con lo que hoy es nuestra Iglesia (comunidad de los que creemos y seguimos a Jesús)

Cómo todo hecho histórico, estos acontecimientos suceden en un tiempo y lugar determinado, para eso conoceremos la línea de tiempo y los momentos más destacados en el pueblo que comenzó a descubrir la presencia de Dios en el mundo, el pueblo Hebreo. Sin embargo siempre tenemos que saber que esas historias NO son algo del pasado, sino que sus enseñanzas son siempre presente y también forman parte de lo que nos pasa a nosotros actualmente.
Por ejemplo: El mismo perdón que experimentaron los hermanos de José en Egipto, puede ser el que experimentamos nosotros cuando alguien que nos quiere mucho nos perdona por alguna macana que nos mandamos, ahí, en esa persona, está el amor de Dios que le dio un corazón semejante al suyo, dispuesto para el perdón y la amistad.

Recordemos que el pueblo Hebreo comenzó a formarse unos 2000 años antes de Jesús… es decir hace unos 4000 años!!! Estos se caracterizaban por vivir en una región llamada Caldea, cerca de lo que hoy conocemos como Arabia, rodeado por grandes desiertos y algunos cordones montañosos.
Es allí, en una región llamada Ur, donde habitaban Abraham, primer patriarca y su familia, desde allí se pondrían en camino hacia la tierra prometida por Dios en la región de Canaán.
La palabra “hebreo” significa “sin tierra” y así se los llamaba por su condición de nómadas. No tenían un lugar fijo donde vivir y se trasladaban de una región a otra en busca de mejores condiciones para su ganado y sus cosechas. Eran principalmente pastores y agricultores. Vivían en grandes grupos de familias que se llamaban tribus y a su vez varias tribus formaban “Clanes”. 
Estos clanes tenían un “patriarca” y una “matriarca”. 
El patriarca era el líder social y religioso, tomaba las decisiones que tenían que ver con la relación con otros pueblos y también era quién decidía si las familias se trasladaban o se quedaban en un lugar. Las matriarcas habitualmente se  dedicaban a las cuestiones que tenían que ver con las cosas sensibles de las familias. La crianza de los hijos, la producción de alimentos, abrigos y lo necesario para asegurar las mejores condiciones de vida para su pueblo.

Recordemos que cuando hablamos de: Hebreos, Israelitas y Judíos, estamos hablando del mismo pueblo, solamente que se lo fue llamando de distintas formas con el correr del tiempo. Mas adelante sabremos los motivos.


Vamos a conocer, en las imágenes que están a continuación y en el video  de la sección "materiales para aprender más", distintos momentos en los cuales Dios se hizo presente en la Historia del Pueblo Hebreo. Luego les propongo que pensemos como, a través de ellos, Dios se hace presente también en nuestra vida!